A Fernando

Es verdad que nos queda
todavia la luna
pero brilla tan lejos...
tan alta, y tan distante,
tan callada,
tan ausente de tacto.
Tan dura ha sido tu marcha
tan injusta,
tan violento el dolor,
tan aspero y total el
desconsuelo...
Tener quisiera la garganta
para poder aullar bajo
la luna...
y que la sierra entera temblara
con mi aullido
y que aullaran los perros
compartiendo su angustia
con la mia...
Caminar sin tu voz y sin
tu risa,
es deambular a tientas
por una espesa cienaga
de cerrado silencio.
Buscar tu movil en el mio,
tus fotos,
tus recuerdos,
nuestras charlas,
buscar desesperadamente
es apurar las heces mas amargas
del caliz del silencio.
He masticado el dolor
hasta extraerle su esencia
mas amarga
Ni siquiera acerte
(por mas que lo intentara)
a abrir mis brazos
ya desvencijados...
para arropar con ellos
la inmensa soledad desamparada
de mis, tus hermanos tristes.
Desde que tú te fuiste
todo ha sido silencio,
permiteme no hablarte de papa y mama
aún te andan buscando,
por todos los rincones de la casa,
desolados y ansiosos,
sabiendo que no van a encontrarte
y encontrandote de pronto
en la resurección?

Aún querido hermano,
aún no he aprendido
la aspera asignatura de tú
viaje a la luz

Tu muerte ha enmudecido
el canto de los pajaros,
el cristal de la lluvia,
y el clamor de la rosa de los
vientos...

Y ahora a tan solo 15 dias
de tu marcha,
como una espada empuño
la palabra
para rajar con ella el velo
de la muerte...
Recupero la voz quebrada y ronca
pero voz todavia,
y en estos dias, tan solo 15,
rescato soplos de tu presencia,
papelitos perdidos con tus diferentes
números de moviles,
cuadernos escolares, fotografias,
prendas de ropa sin lavar que
guardan el aroma perdido
de tu cuerpo.

Tan solo 15 dias después,
tan solo 15 dias antes
de tu partida,
los dias uno a uno,
se me han ido rompiendo
despeñados...
Esteriles los pasos,
y los rumbos,
el calendario inutil,
opaca la mirada.
Sigo rebelandome ante este
desorden cosmico
que te alejo de nosotros

Es verdad que nos queda la
luna, encaramada
al campanario mudo de
los cielos,
pero la luna es fria, lejanisima
Es dificil andar cuando todo
esta hueco,
porque se hunden los pasos
en viscosas arenas movedizas,
porque se pierde el rumbo
con tanta niebla helada
rodeandonos.
Porque el alma se agota
de deambular a tientas,
palpando el agujero de tu
muerte.
Porque el aíre es espeso y venenoso,
porque ciega el vacio
y el profundo silencio desorienta,
y no hay norte, ni ruta,
ni mapa que nos guie
en esta travesia del desierto

Diciembre querido hermano,
nos ha arrojado sin compasion
un chorreon de plomo derretido
partiendo las crujías de tu familia
y hundiendo con tu marcha
los cimientos de nuestros
dañados corazones.